En España llega el tsunami. Todos sabemos que las pensiones ya no se revalorizan con el IPC (Índice de Precios de Consumo), que cada año pierden poder adquisitivo, que el Fondo de Reserva de la Seguridad Social se termina este mismo año y que el propio Estado dice que en España, hasta el 2022, se generará un agujero anual de 15.000 millones en la Seguridad Social. El resumen es que en España, con ese tsunami, veremos cómo bajan las pensiones. Año tras año, el Estado español menospreciará la dignidad de sus jubilados.
Cuando llega un tsunami, lo mejor es protegerse en tierras más altas, y en ese caso Catalunya tiene un 25 por 100 menos de paro, con salarios más altos (que son los que pagan las pensiones) y dispone de una economía más sólida y diversificada. El futuro estado será plenamente solvente.
Con el nuevo estado, en Catalunya tendremos una oportunidad para recuperar la dignidad de perceptores de prestaciones, pensionistas y futuros pensionistas. Esta oportunidad la tendremos votando Sí en el referéndum que hará de Catalunya un nuevo estado independiente.
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